El dios de este sistema de cosas ha cegado las mentes de los incrédulos
(2 Cor. 4:4).
Por desgracia, algunos miembros de la congregación cristiana dan muestras de que, al menos hasta cierto punto, se sienten cómodos en el mundo de Satanás. Si usted se siente así aunque sea solo un poco, háblele a Jehová en cuanto a ello. No olvide que este es el mundo de Satanás y, como tal, refleja su frialdad y egoísmo (Efes. 2:1, 2). Para no caer víctimas de las trampas del Diablo, tenemos que aprovechar por completo las ayudas espirituales que Jehová ofrece a sus siervos, a quienes hacen de él su morada. Entre tales ayudas se encuentran las reuniones cristianas, la adoración en familia y las “dádivas en hombres”, es decir, pastores nombrados por Dios para consolarnos y apoyarnos en nuestra lucha con las dificultades de la vida (Efes. 4:8-12). El hermano George Gangas, quien fue miembro del Cuerpo Gobernante por muchos años, escribió: “Cuando estoy entre [los siervos de Dios] siento que estoy en casa con mi familia, en un paraíso espiritual”. ¿Se siente usted como este hermano? w13 15/3 4:11, 12
No hay comentarios:
Publicar un comentario